LA VISIÓN PLEYADIANA



 

TEXTO DE LA AUTORA NORTEAMERICANA BÁRBARA MARCINIAK, CONOCIDA COMO CANALIZADORA DE LAS ENSEÑANZAS PLEYADIANAS, EXTRAIDO DE UNA DE SUS OBRAS.

 

Ha llegado el momento en que todos vosotros debéis redefinir vuestras propias identidades en un sentido mucho más amplio. En el cosmos están teniendo lugar acontecimientos de los que ni vosotros ni vuestros líderes políticos tenéis conocimiento. Tenéis que aca­bar con esta locura de vuestra definición de los dioses; de pensar que existen seres que llegan del cielo a este planeta con talentos y habilidades especiales, y que todos ellos están conectados espiritualmente. Descu­briréis, como especie, algunas ideas perturbadoras en los próximos años. Os estamos preparando, por decre­to de la Familia de la Luz, para que podáis compren­der y estar informados de vuestras propias opciones.



Hemos subrayado esta idea de la multidimensionalidad: el concepto de que podéis estar en muchos sitios a la vez y que podéis cambiar vuestra consciencia. Hemos compartido con vosotros la idea de que se crearán numerosos mundos fuera de la Tierra. En un momento u otro, dudaréis de todo lo que hemos compartido con vosotros. Vuestro sistema sufrirá una con­moción —y no creeréis hasta qué punto se os ha pri­vado de información—, de manera que negaréis la validez de nuestros datos por un tiempo.



Sólo podemos ofreceros información basada en vues­tra propia aceleración. Tenéis que evolucionar y tener la presencia de ánimo para pedir información, porque exis­te una ley divina en lo relativo a la interferencia. Muchos han violado esa ley y han interferido con la Tierra: inclu­so algunos miembros de nuestro reino ancestral lo han hecho. Os hemos dicho a menudo que éste es un univer­so de libre albedrío y una zona de libre albedrío de manera que, por supuesto, el tema subyacente es que todo está permitido. Por eso, siempre hay quienes desean ser amos y señores, y tener autoridad sobre otros. Habéis sido muy ingenuos en lo relacionado a cuántos seres controlan aquí a los demás.



La Familia de la Luz ha destacado su predilección por crear sociedades en las que existe un enorme mo­vimiento en todas direcciones a lo largo de los rayos de luz. ¿Qué significa esto? La luz es información, de manera que la Familia de la Luz es la familia de la información. Existen consciencias (familias de gue­rra) que pasan quizá billones de años, en vuestro con­cepto del tiempo, estudiando, promoviendo y experi­mentando el control sobre la consciencia. En un uni­verso que existe fuera de la limitación del tiempo, todos los guiones dentro de la zona de libre albedrío son interpretados.



Es el momento de cambiar radicalmente la forma en que os veis a vosotros mismos y de romper las barreras. Es el momento de que os elevéis por encima de la insignificancia de los dramas y los sucesos coti­dianos, y empecéis a conectar a nivel cósmico con el drama más elevado que ya está teniendo lugar. De esta forma, puedes estar mejor informado sobre tus propias intenciones, tus propósitos y tu drama. Debes ser capaz de comprender tanto tu identidad como tu habilidad para trasladar tu identidad a cualquier mun­do que escojas.



Esta historia de la Familia de la Luz, o «El Regre­so de los Camisetas Blancas», como nos gusta llamar­la, es sobre quién eres. Te has comprometido a reali­zar una cierta tarea, a estar en una misión, y a recordar y realizar lo que has venido a hacer aquí. Hemos dicho que tus mundos y tu identidad dentro de ellos van a cambiar drásticamente, y ese momento está cer­ca. Muchos de vosotros habéis experimentado cam­bios. Si miráis atrás y veis quiénes erais hace un año, muchos de vosotros veréis que tenéis mucho más po­der para hacer cosas.



El ideal es que cada uno de vosotros empiece a sentir que es cierto que uno crea su propia realidad en todo momento y que todas las situaciones que experi­mentas las has diseñado tú, sin importar si estás sien­do utilizado o no. En esta época, el ideal es que todos y cada uno de vosotros domine el arte de la manifesta­ción, porque es el momento de atraer la red cósmica de información hacia vuestro cuerpo y conectarla a la psique para poder servir como transmisores de esta información en el planeta. Ésta es la red que es puesta en marcha por los filamentos con codificación de luz fuera de tu cuerpo.



Tenéis que aprender a discernir qué y quiénes están llegando de los cielos porque os van a engañar y embaucar y no lo vais a entender. Nosotros podemos verlo porque sabemos lo fácil que es engañaros y embaucaros. A veces lo hacemos nosotros con el fin de haceros avanzar. Os hemos dicho que ya os hemos engañado en algunas ocasiones. Esto fue necesario porque, si os contáramos toda la historia, muchos de vosotros hubierais salido huyendo hace tiempo.



El ideal es que os hayamos dado confianza. Hemos colocado en vosotros un nuevo código de información para que podáis coger las bases de este sistema (el con­cepto de que os creáis a vosotros mismos, y que creáis vuestra realidad a través de vuestro pensamiento) y for­mular un mundo diseñado por la Familia de la Luz. De esta forma, un plan y una nueva red cubren una porción de la Tierra con el fin de que se pueda poner en marcha una probabilidad completamente nueva. Sin vosotros y la nueva probabilidad que estáis trayendo, existe el po­tencial de que en algún momento una gran guerra cós­mica se produzca aquí en la Tierra.



Busca con tu centro de sentimientos y siente la confusión que existe y que se extiende por el mundo. Este planeta ha operado en una frecuencia muy baja, una frecuencia basada en la falta de poder. Tu identi­dad ha estado basada en lo que podías recoger de fuera de ti mismo. Las doce hélices harán que todo lo que hasta ahora ha representado y rodeado a las dos hélices se vuelva irrelevante. Todo el dinero ahorrado y todas las posesiones (toda la seguridad basada en las primeras dos hélices, que os proporciona una identi­dad) es completamente irrelevante para la evolución del planeta.



Siente el miedo y la incertidumbre que corre por las vidas de los humanos a medida que empiezan a tomar conciencia de que la manera en que sus vidas han estado definidas hasta ahora se viene abajo. Tenéis que daros cuenta de que la luz es la responsable de esto y que vosotros, como miembros de la Familia de la Luz y como Portadores de Frecuencias, estáis provocando este derrumbamiento porque lleváis una carga electromagné­tica que emite la nueva frecuencia en el planeta. Ayudáis a crear este caos de nueva consciencia.



Recuerda este último año, o los últimos dos años de tu vida y date cuenta de que ha habido momentos en los que has estado sumido en el más absoluto caos de consciencia. Todos vosotros habéis estado sumidos en un caos de decisiones con respecto a quiénes sois, dónde queréis vivir, con quién os queréis emparejar, si queréis permanecer en pareja o no, si queréis tener niños o no, si queréis seguir siendo padres, y muchas otras cosas.



Deja que tu mente observe a las comunidades y sienta cómo cambian los pilares sobre los que la gente ha basado sus vidas. La concepción global de la reali­dad se está yendo; se está yendo; se ha ido. Los cimien­tos están desapareciendo, pero hay quienes aún no son capaces de percibirlo. La razón fundamental de este cambio es que ahora es posible acceder a una nueva información que hace que la antigua información re­sulte decrépita y arcaica, y vosotros sois los responsa­bles de esto. Por lo tanto, sois, hasta cierto punto, responsables de vuestra propia evolución a través de esta actitud y de ser vuestras propias fuentes de inspi­ración siendo un ejemplo viviente para los demás.



Tenéis un papel muy activo. Hay muchos que di­cen: «¡Oh, no, ahí llega la luz!», porque la luz es conocida por alterar todas las frecuencias de vibración con las que entra en contacto. La luz transporta infor­mación y la información expande el sistema, para que los viejos sistemas dejen de existir. De manera que, a medida que la luz avanza para destruir, también crea nuevos sistemas. Se crea un nuevo orden.



A algunos de vosotros os cuesta veros como des­tructores porque tenéis un sistema de creencias acerca de la destrucción. Es un paradigma, y si os quedáis estancados en esa vibración y no acabáis con esas ideas, quedaréis sumamente confinados y restringidos en la experiencia de la realidad. Sí, definitivamente, sois destructores. Destruís aquellos sistemas en los que prevalecen el equipo oscuro y la ignorancia. La luz entra para destruir todos los sistemas, y la expe­riencia de la destrucción está en relación a la fuerza o el fervor con que la consciencia se aferra a aquello que está siendo destruido.



¿Quién os echará un cable cuando las cosas se pongan feas? ¿Dónde se encuentra el equipo de resca­te? Sois vosotros. Con el fin de que esta transforma­ción tenga lugar, tenéis que utilizar vuestros dones para producirla. Se os ofrece una asistencia increíble desde todas las esferas; no obstante, todo depende de vosotros, no de nosotros. Cambiaréis la frecuencia, sencillamente, mediante el compromiso, la determina­ción y el .poder de la voluntad.



Descubre aquello que eres en tu cuerpo físico, por­que es tu fuente de poder aquí. Aprende a dirigirlo, a utilizarlo y a ser uno con él. Al llevar la luz dentro de tu cuerpo, haces llegar esta frecuencia al planeta, y esta frecuencia contiene información. La frecuencia de la luz contiene la historia de vuestra identidad y la historia de tu consciencia particular. Como ya hemos dicho, esa consciencia fue dispersada de vuestra base de datos, o estructura celular, porque aquellos que llegaron para ser vuestros dioses no podían controlaros mientras tuvierais las mismas habilidades que ellos. Por esta razón, llevaron a cabo la experimentación biogenética y la mutación que ha sido denominada «la Caída». Fue entonces cuando predominó la ignorancia en la especie humana. Se realizaron muchos expe­rimentos distintos durante un largo período de tiempo.



La luz representa la unión de aquello que ha sido separado y, para llevar a cabo esta misión, todo lo que tienes que hacer es ser. Tal como eres y, a medida que vayas evolucionando y permitiendo que tu personali­dad evolucione, debes, verdaderamente, reconocer el hecho de que todos los demás miembros de la luz también están evolucionando. Envías tu transmisión telepática diciendo que tu presencia está aquí de la misma manera que nosotros os decimos a veces: «Es­tamos aquí». Nosotros también somos miembros de la Familia de Luz y traemos información y la emitimos por todas partes.



Es necesario que todos y cada uno de vosotros examine las fronteras que ha establecido en tomo a sí. Crees que has evolucionado, que tienes una amplia visión y que ves muchas cosas. También en relación al lugar de donde provienes es cierto que has progre­sado. Sin embargo, te garantizamos que no estás vien­do las fronteras que te has impuesto en la actualidad, que son las que definen cuanto crees que eres capaz de hacer y cuanto no. Son las que te mantienen en esta versión o frecuencia de la realidad.



Estas fronteras que estableces, y que proclamas sobre ti mismo, te impiden moverte con la informa­ción que despierta dentro de ti. Esta información es parte de la inspiración espiritual. Se retiran distintas capas de la realidad para que podáis sintonizar mejor con las esferas del espíritu.



De eso se trata el progreso espiritual. Queremos que abandones las fronteras y dejes de definir y prote­ger todos los aspectos de tu vida.



Llevar la luz es una tarea imponente. Una vez has permitido que la luz entre en tu cuerpo, empiezas el proceso del cambio, que no siempre es alegre, ni ins­pirador, ni divertido, como muchos de vosotros ya habéis descubierto. En este proceso, cuando las cosas no son tan divertidas, lo primero que podríais hacer para evitar evolucionar y cambiar sería responder a los acontecimientos con miedo. Podrías echarle la culpa a otro y quejarte, y podrías sentir y creer que alguien te ha hecho algo.



Esto es lo que cree el resto del planeta, pero ellos no son miembros de la Familia de la Luz. Por descon­tado que aquí hay millones de miembros de la Familia de la Luz, y que la luz está regresando a este planeta en donde los «Camisetas Oscuras» han gobernado du­rante mucho tiempo. Los Camisetas Oscuras se han estado alimentando de vuestras emociones de miedo y negatividad, y de la guerra y la codicia, porque en este universo de libre albedrío todo está permitido. El Crea­dor Principal forma parte tanto del equipo oscuro como de la Familia de la Luz. El Creador Principal es todas las cosas.



Os enseñamos por medio de historias. Algún día, quizá, podréis ver a través de las historias que os contamos. Ya no os harán falta, y seréis capaces de romper los paradigmas a fin de conocer nuevas reali­dades. Hasta que ese día llegue, os hablamos median­te historias para mantener vuestro interés y atraer vues­tra atención hacia las áreas en las que os da pavor entrar; áreas en las que habéis comprometido la pro­fundidad de vuestras almas en el viaje.



Dentro de muy poco tiempo, habrá una gran nece­sidad de tomar consciencia de quiénes son los verda­deros Portadores de Frecuencias y quiénes son senci­llamente unos charlatanes. Los Portadores de Frecuen­cias serán llamados a crear una cierta estabilidad en este planeta, porque saben, en un 100% del tiempo, que ellos crean su realidad. Aprenden a desafiar las leyes de la humanidad dirigiendo conscientemente la consciencia y la energía. Ésta es la profundidad de la impecabilidad y el compromiso del que estamos hablando.



No estamos aquí para replicar ni para hacer que os sintáis bien con vosotros mismos. Estamos aquí para recordaros quiénes sois y lo que habéis acordado ha­cer; lo que habéis venido a realizar en este planeta. Estamos aquí para animaros a que recordéis; para ofreceros una guía y una asistencia para que seáis capaces de descubrir por vosotros mismos el milagro que reside en el cuerpo humano.



La mejor manera de operar en estos momentos es siendo portadores de vuestra propia frecuencia, sin ir por ahí «salvando» a todo el mundo. Haz todo lo que esté en tus manos para continuar estando consisten­temente consciente y comprendiendo lo que está suce­diendo. Sé consistente con la frecuencia de luz que te proporciona información, y con la frecuencia del amor, que es la frecuencia de la creación.



Cuando los dioses creadores se vean privados de su fuente de alimento y la barrera de frecuencia sea perforada, la red de la Tierra cambiará. En realidad, la Tierra está experimentando una iniciación. La Tierra cuida de todos sus habitantes y evoluciona con ellos hacia una existencia en la que las más maravillosas posibilidades serán hechos cotidianos, en la que los milagros se convertirán en el modo de vivir porque existirán dentro de una frecuencia que estará disponi­ble. Vosotros ayudáis a darle vida a esa frecuencia en este planeta al vivir vuestras vidas en concordancia con la luz y con lo que sabéis. Éste es un trabajo de naturaleza individual. Podéis trabajar en grupo y tener líderes pero tenéis que evolucionar como individuos. Al hacerlo, y al ser conducidos por la luz a vivir de una cierta manera, comenzaréis a sentir la excitación.



No es necesario trabajar continuamente con noso­tros ni con nadie para recoger información. La única continuidad que es necesaria es que trabajes continua­mente contigo mismo y busques el significado de lo que nosotros llamamos «el yo exaltado». Siente lo que significa el yo exaltado: es triunfador, liberado, alegre con el éxito, y es el logro más elevado.



Este planeta necesita desesperadamente entidades que estén comprometidas en la búsqueda del yo exal­tado. La continuidad de la que hablábamos (y que os interesa incorporar a vuestras vidas) implica conocer en vuestro interior, a cada instante, que estáis com­prometidos a descubrir esta exaltación. Esta exalta­ción puede ser transmitida en palabras a modo de frecuencia, o como ola de sentimiento, o como vi­bración. Todos vosotros comprendéis la vibración en términos de luz y sonido. Las vibraciones siguen fun­cionando; llevan y transmiten formas de inteligencia. Cuando te miras y no olvidas que estás en este sendero (recordándote continuamente a ti mismo que estás atra­yendo luz hacia tu cuerpo, buscando elevar la frecuen­cia de tu ser físico y desafiando las leyes de la humani­dad para alterar la frecuencia del planeta) estás produ­ciendo un tipo de continuidad que puede hacer más que todos los libros y las cintas del mundo.



No existe nada con más poder, que tu compromiso con el yo exaltado. Una vez te has comprometido con la energía de la luz, la energía de la exaltación y la frecuencia elevada, estás marcado. Entonces debes vi­vir de acuerdo con lo que estas energías ponen delante de ti cuando pidas que tu tarea sea acelerada. 



Ante todo, vive tu luz. Vive valientemente esa luz que hay dentro de ti. No vivas encerrado: vívela. Di lo que sabes sin subirte a una caja moviendo los brazos como un fanático. Afirma sencillamente: «Esto es lo que yo creo. Esto es lo que yo vivo». Si, por ejemplo, alguien te dice: «Cuidado, que cogerás un resfriado», puedes responder: «Yo no creo en eso de coger res­friados. Yo no utilizo mi cuerpo para la enfermedad». Al decir cosas como ésta haces que los demás despier­ten. Di lo que sabes de manera casual en conversacio­nes con la familia y los amigos.



Donde quiera que te encuentres, utiliza el pilar de luz. Te recomendamos que visualices un pilar de luz entrando por la parte superior de tu cabeza, abriendo tu coronilla y llenando tu cuerpo de luz. Imagina este pilar de luz del cosmos llenándote, para luego salir por tu plexo solar formando una esfera de luz alrede­dor de tu cuerpo que te permita existir dentro de un resplandeciente huevo etérico.



Cuando te amas a ti mismo y a la Tierra, y sabes que estás aquí para redefínir, rediseñar y romper las fronteras de la humanidad, lo transmites. Vives tu vida entregado a esto. Si nos preguntas cuánto tiempo debes dedicarle a esto, te diremos: «Es muy sencillo: todo el tiempo». Todo. No es algo por lo que te tengas que preocupar, es algo que sencillamente eres. Lo vives; es tu divinidad. Descubrirás que cuando vives tu luz atraes a otros que están muy interesados en vivir sus vidas de la misma manera, creciendo cada vez más en número.



Cuando te comprometes diciendo: «Espíritu, deseo que me emplees. Hazme trabajar y muéstrame lo que soy capaz de hacer. Dame la oportunidad de vivir mi luz, de decir la verdad, y de llevar la luz por todo el planeta», entonces el Espíritu te pondrá a trabajar. Sé claro en cuanto a tu disponibilidad; haz un contrato con el Espíri­tu. Dile lo que quieres como compensación. El Espíritu te permitirá negociar y escribir el contrato que quieras, siempre y cuando operes en calidad de servidor de ti mismo con la finalidad de elevar tu vibración. Cuando estás al servicio de ti mismo y te comprometes en tu evolución y cambios personales, inspiras a todos los que te rodean. En eso consiste el servicio. El servicio no es salir y martirizarte diciendo: «Yo te salvaré». El servicio es hacer tú mismo el trabajo y vivir de manera que todos cuantos entren en contacto contigo se vean afectados por tu viaje.



No hay nada malo en ponerse un poco pendenciero con el Espíritu y decir: «Ahora escuchadme, amigos, ya he tenido suficiente. Lo he estado pidiendo y estoy dis­puesto a hacerlo. Por favor, quiero una aceleración». Si deseas una aceleración tienes que ser claro, estar prepara­do para el despegue y estar abierto a leer los símbolos a medida que te vayan llegando. Cuando un libro se caiga de una estantería, léelo. Cuando se te presente la oportu­nidad de ir a algún sitio, no digas: «Lo siento, no puedo permitírmelo». Hazlo. Cuando una persona aparezca en tu camino, y has estado diciendo que deseas una relación pero esa persona no tiene el envoltorio correcto, hazlo. Al operar sin ningún sentido quizá sean estas cosas las formas que te ofrece el Espíritu de romper estructuras. Si eres claro y te comunicas en toda situación, puedes avanzar mucho.



Todos vosotros pensáis demasiado sobre cómo re­sultarán las cosas y qué aspecto tendrá el envoltorio. Es importante darse cuenta de esto. De manera que, cuando pidas una aceleración, debes estar preparado para correr riesgos que la mente lógica no comprende­ría. La mente lógica tendrá una pataleta por todas estas cosas porque tendrá miedo. Cuando te oigas a ti mismo decir: «No puedo hacerlo» o «Esto no tiene sentido», escucha. Son palabras clave. Di, sencilla­mente: «Soy guiado divinamente. Quiero una acelera­ción. Me propongo trabajar de una manera inspiradora, y correré el riesgo. Siento que esto es lo correcto aunque no tenga sentido, de manera que me lanzaré».



No obstante, si no sientes que es lo correcto, y además no tiene ningún sentido, entonces no lo hagas. Confía en tus sentimientos.



Está teniendo lugar una selección; una selección de los elegidos. ¿Qué significa ser los «elegidos»? Aquellos que se reúnen cuando nosotros hablamos, quienes escu­chan el sonido de su canción interior, son los elegidos. Que seas un elegido no significa que subirás de rango automáticamente y que llevarás a cabo la misión que debe ser realizada. ¿Quién te escogió? Vosotros os esco­géis a vosotros mismos. No sois miembros de un club exclusivo y, sin embargo, por otro lado, sí lo sois. Ser miembro de este club es voluntario, y todos vosotros decidisteis quienes seríais y por qué vendríais aquí. No podemos enfatizar lo suficiente que «valor» será el apo­do de todos y cada uno de vosotros.



Muchos de vosotros vivís escondidos. No estáis dispuestos a permitir que todo el mundo sepa cuáles son vuestras creencias más íntimas. Puede ser que os sintáis seguros en una habitación discutiendo una se­rie de temas, algunos muy lejanos y, sin embargo, en vuestro lugar de trabajo o con vuestra familia o donde sea, os ponéis un esparadrapo en la boca y no os permitís decir la verdad.



Existe multitud de personas cuyas codificaciones es­tán esperando a oír vuestra voz. De manera que vosotros, los elegidos, estáis siendo seleccionados en esta época. Estáis siendo escogidos por vuestro valor. Si no eres capaz de reunir valor ahora, no estamos muy seguros de que seas capaz de hacerlo en el futuro.



Cada uno de vosotros viene a este planeta para realizar una tarea, y esa tarea está a la mano. Es ahora. La década del cambio está en vosotros, y cuando integréis y comprendáis lo que este cambio significa, las vidas de todos y cada uno de vosotros se verán alteradas. El cambio significa abandonar muchas co­sas, alejarse de muchas otras y unirse a otras porque confiaréis. Confianza es la palabra que os encantaría tener como apodo, y sin embargo, confianza es algo que decís no tener.



¿Qué significa confiar? Significa tener el conoci­miento de que tus pensamientos crean tu mundo; te­ner, sencillamente, la certeza, con una calma divina y un conocimiento interno, de que si piensas algo, así es. Es éste el tema que os presentamos una y otra vez, de todas las maneras y por todos los medios posibles, con el fin de que un día de éstos lo comprendáis. Una vez lo hayáis comprendido y empecéis a vivirlo, vues­tras vidas comenzarán a cambiar.



Seguimos poniendo énfasis en el hecho de que el momento de ponerse en marcha es ahora. Esto no quiere decir, necesariamente, que se os esté acabando el tiempo. Quiere decir que el tiempo apremia, y que si no actúas, las cosas se pueden poner incómodas. Como ya hemos dicho, está teniendo lugar una selección de los elegidos. Os habéis elegido vosotros mismos; por eso, si no entráis en el anteproyecto que habéis creado para vosotros, en cierta medida se os empezará a acabar el tiempo. Os quedan pocos años antes de que todo empiece a ponerse confuso y si no vivís vuestras vidas en la verdadera eminencia de la luz, como aceptasteis hacer, podría ser demasiado tarde. En otras palabras, si continuáis dejando pasar el tiempo, os dejaréis arrastrar por una ola gigan­tesca, quizá literalmente.



No importa la misión en la que vayas a participar, es parte de tu anteproyecto y de tu plan de evolución. Al evolucionar, influyes en la evolución del planeta. Todo lo que haces es para tu evolución. Cuando com­prendas lo que son los humanos y lo que es este lugar, empezarás a abrir camino para otros. Descubrirás que aparecen ante ti acontecimientos que jamás hubieras imaginado. Habrá cosas que estarán más allá de tu comprensión; «montajes», como los llamamos noso­tros, u oportunidades que nunca imaginaste. Entonces sabrás que estás viviendo tu luz, y haciéndolo con valentía.



Existe una gran probabilidad de que los portadores de luz sean cuestionados en los próximos años. Com­prende que esto forma parte del plan. Todos vosotros debéis tener una intención clara acerca de cómo os gustaría que sea diseñada la realidad. Esto no quiere decir que no puedas ser flexible; significa que debes operar con claridad. Dices: «A mis guías y a todos aquellos que me están asistiendo en mi viaje evolutivo en la Tierra: Es mi intención tener éxito. Es mi inten­ción estar siempre seguro en todo lo que haga. Es mi intención dar amor y recibir amor en todo lo que haga. Es mi intención pasármelo bien y estar bien provisto con prosperidad de acuerdo a mis necesidades. Es mi intención no dejarme fascinar por el mundo material».



Aunque debes hacer tu propio trabajo para evolu­cionar, hay muchos seres extra-planetarios y no-físi­cos dispuestos a trabajar contigo. Todo lo que tienes que hacer es llamarlos para que te asistan. Cuando lo hagas, afirma siempre con claridad que toda asisten­cia debe venir de la luz. Permanece en tu integridad y sé consciente. En este planeta, se asume que si alguien es inteligente resulta consciente espiritualmente. ¡Esto es absolutamente falso! Una persona puede ser bri­llante y aprender a trascender las leyes humanas y, sin embargo, no operar con la frecuencia de luz o la fre­cuencia del amor. Sé consciente de esto y expresa con claridad el tipo de asistencia que deseas.



Hemos mencionado muchas veces que la frecuen­cia de luz trae información. La frecuencia del amor trae creación, respeto por la creación y conexión con toda la creación. La frecuencia del amor sin la fre­cuencia de luz puede ser una cosa muy grave. Si crees que la frecuencia del amor proviene de algo extemo a ti en lugar de provenir de tu interior, harás lo que se ha venido haciendo en este planeta una y otra vez: adorar a alguien que promueve la frecuencia del amor como si fuese un santo.


El ideal es llevar la frecuencia de luz de la infor­mación (informarse) y unirla a la frecuencia del amor. Esto te permitirá sentir una parte de la creación y no juzgarla ni tenerle miedo, sino más bien ver, sencilla­mente, su divinidad y su perfección, a medida que evoluciona para instruir acerca de sí misma a toda consciencia.